Si aún te preguntas cómo usar el aceite CBD para dormir, en este artículo te contamos todo lo que debes saber para utilizarlo correctamente.
En los últimos años, se ha abierto una puerta al uso del CBD para tratar los problemas de sueño. Varios estudios parecen indicar buenos resultados acerca de la capacidad de relajación y mejora de la calidad del sueño que ofrece esta sustancia.
Otro dato que los estudios empiezan a demostrar es cómo el CBD favorece el funcionamiento del sistema nervioso central y disminuye los efectos de la ansiedad. Esto también se puede traducir en mejoras en el sueño.
Además de ayudar a conciliar el sueño por sus propiedades relajantes, el aceite de CBD también es beneficioso para aquellos que experimentan malos sueños vívidos durante la llamada fase REM debido a su potencial efecto positivo sobre la ansiedad.
En definitiva, la investigación preliminar en cannabis e insomnio sugiere que el CDB puede tener potencial terapéutico para el tratamiento del insomnio.
¿Cuánto usar?
Cada persona puede necesitar una dosis diferente en función de factores como su genética, su peso, su metabolismo, su edad, sus hábitos e incluso su estado de ánimo.
Estudios como el publicado por la US National Library of Medicine, comienzan por administrar dosis de 25 mg/d. De aquí, como hemos dicho, sería cuestión de ir evaluando día a día el efecto y escuchar nuestro cuerpo y en caso de ir modificando, siempre poco a poco.
Otros como el del British Journal of Clinical Pharmacology indican que la dosis adecuada oscila entre 1 y 50 mg por día. Nosotros recomendamos empezar con una dosis media/baja, observar los efectos durante la primera semana y, a partir de ahí, incrementar la dosis si fuera necesario.
¿Cuándo usarlo?
Lo ideal es utilizar el aceite de CBD antes de ir a la cama e incluso en momentos de estrés durante el día. Es importante usarlo siempre a la misma o mismas horas durante las primeras semanas para poder detectar con facilidad la dosis idónea.
Precauciones
Si estás tomando otros medicamentos consulta con tu médico para asegurar que no haya interacciones con el CBD. Sobre todo es importante descartar interacciones con otros fármacos metabolizados a nivel hepático, proceso que resultaría en un incremento del fármaco a nivel plasmático.
Excepto lo mencionado en el párrafo anterior, se puede emplear el aceite con un perfil de seguridad y tolerabilidad favorables. Los efectos secundarios derivados de su uso son leves y poco frecuentes entre los que se encuentran: cansancio, somnolencia, sequedad de boca, mareos y disminución del apetito.
A modo de conclusión, podemos decir que hemos visto que el aceite de CBD para dormir parece funcionar. Sus beneficios lo sitúan como un producto rompedor que gana terreno frente a otros tratamientos para combatir el insomnio y la calidad del sueño como la melatonina o el triptófano.
¿A qué esperas para probarlo? Puede contactar con los profesionales de Ducreams si tienes alguna duda, nosotros te ayudaremos.